domingo, 30 de septiembre de 2012

Capítulo 5: Lagrimas por nuestras mejillas

Llegó la hora de entrar. Le dimos la entrada al guarda para que nos dejara entrar, entramos y vimos que estaba el sofá blanco y un piano. Nos sentamos en la segunda fila enfrente del sofá, y poco a poco se fueron llenando los asientos. Eran ya las 22:00h y Pablo no aparecia, sacamos la conclusion de que le gustaba hacerse esperar. Derepente apagaron todas las luces, y la gente empezaba a gritar, pero Pablo no aparecia. La gente gritaba cosas como: "Tu si que vales!" Y osotras no íbamos ha ser meno, y empezamos a gritarle también. Empezó a sonar una música, se encendieron las luces, pero Pablo todavia no estaba. Todas nos cojimos de las manos, cada vez empezamos a apretarlas manos  mas fuerte, empezó a sonar unos acordes de una guitarra, su guitarra. Nos soltamos de las manos y cogimos la camara de fotos, un foco señaló el sofá blanco, donde Pablo estaba sentado. Nosotras estabamos enfrente de él, empezamos a emociorarnos, todo aquello era precioso, ver a Pablo y con esas personajillas que nada mas hablar con ellas se me iluminaba el día. Llevábamos unas barras fosforentes, las empezamos a mover, Pablo nos miró y sonrió, en ese momento todas nos miramos y vimos que por nuestras mejillas caian lágrimas. Pablo nos miró y nos dijo que lloraramos y nos guiñó el ojo. Nos miramos unas a otras, y empezamos a cantar con él. Empezó a tocar los acordes de "Caramelo", nos miramos y nos pusimos en pie y empezamos a bailar, la gente se arrancó a bailar cuando nos vió a nosotras bailar. Pablo nos dió las gracias y nos tiró un beso. Nosotras nos volvimos locas. A la mitad del concierto, dió una pausa y se fué al camerino. Empezamos ha hablar del beso y el guiño de Pablo, derepente, se acerca el guarda y nos dice:
-¿Me podeis acompañar?
Nosotras un poco asustadas le decimos que si. Seguimos al guarda y nos llevó hasta la puerta del camerino de Pablo. Nosotras no nos lo creíamos. El guarda nos dice:
- Hay una persona que quiere hablar con vosotras.
Se abre la puerta y aparece Pablo. Y nos dice:
- Hola chicas!
Y nosotras alucinando le decimos: - Hola Pablo!
Pablo: - entrad en el camerino que os tengo que decir una cosa.

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